Hace una semana retornaba y prendía la mecha de la ilusión de los hinchas. Hoy vuelve a encender las alarmas de preocupación. Riquelme nuevamente estuvo impedido de participar del entrenamiento y se perdió el ensayo formal en el que Borghi probó dar un volantazo modificando la táctica que venía manejando. Sólo pudo observar a sus compañeros sentado desde un costado. En las próximas horas podrían realizarle un estudio para conocer con mayor precisión qué lo está aquejando.
En la semana debió trabajar siempre de manera diferenciada. El viernes no alcanzó a finalizar la práctica y se comunicó que padecería una tendinitis en el talón del pie derecho. Chávez ocupó su lugar en el entrenamiento. Está de más explicar lo que el equipo pierde sin el `10´ en cancha. Ante Argentinos regresó después de seis meses de inactividad y con destellos fue el mejor de Boca por lejos. Algunos dicen que llegará sin problemas al superclásico, otros que no estará disponible.
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